El expresidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y Juan Carlos Monedero, fundador de Podemos, y la diputada colombiana Piedad Córdoba reaparecieron en Caracas horas antes de que comience la jornada electoral.
RL / Idaed / Infobae
Según la televisión chavista retransmitió en la noche del sábado el reencuentro entre Rodríguez Zapatero y los altos mandos chavistas: además de Maduro, estában presentes la vicepresidente Delcy Rodríguez y su hermano Jorge Rodríguez.
La directiva chavista calificó a Rodríguez Zapatero, Monedero y Córdoba como “veedores internacionales”. La estrecha -y polémica- relación del chavismo con los tres políticos es conocida.
En su última declaración el pasado 27 de octubre, “El Pollo” -pendiente de ser extraditado a Estados Unidos por delitos de narcotráfico- aseguró detalló cómo la dictadura chavista financió ilegalmente al partido español.
Con Zapatero la relación también es de larga data, de hecho, el ex presidente del gobierno español fungió como mediador en dos de los truncados procesos de diálogo con la oposición y siempre, fue denunciado para favorecer al gobierno. “Es un aliado” de Nicolás Maduro en Venezuela. No es un intermediario, ni un mediador, ni un hombre neutral”, acusó en varias oportunidades Juan Guaidó.
La colombiana Piedad Córdoba es una figura recurrente en las fotos del régimen con personalidades internacionales. Siempre, desde la época del fallecido Hugo chávez, participó activamente del entramado chavista.
En los últimos días, su relación con el régimen también se transformó en materia de investigación judicial en su país, que busca esclarecer su relación con Alex Saab, el testaferro de Maduro extraditado a los EEUU.
Saab está acusado de haber lavado dinero con un plan de alimentación para familias de escasos recursos en Venezuela y al parecer, la exsenadora Piedad Córdoba estaría ligada con Saab ya que habría recibido dinero para apoyar sus proyectos políticos.
Maduro amenazó a los observadores de la UE
Los comicios regionales de hoy, muy cuestionados por la falta de transparencia, sumaron ayer una polémica más con las declaraciones del dictador Nicolás Maduro. “¿Puede algún veedor internacional, desde algún país del mundo, dar un veredicto sobre la validez de un proceso genuinamente nacional y soberano de un país?”, se preguntó irónicamente el chavista y se contestó: “No, así que se bajan de esa nube, Comisión de la Unión Europea”.
La amenaza directa la hizo en un encuentro con supuestos veedores internacionales, entre los que obviamente no estaban los europeos, y en cadena nacional hora antes de los comicios regionales de mañana.
“Si pretenden violar la soberanía, exponer su compeljo de seguridad, tendrán la respuesta contunndente que Venezuela sabe dar”, agregó para completar la amenaza.
Envalentonado en su diatriba, el dictador además acusó a la Unión Europea de tener “viejos complejos de superioridad colonialistas” y de pretender “humillar” a los países, “imponer por el chantaje diplomático y económico”, e “imponer modelos de monitoreo, de dominación, de hegemonismo”.
