El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Yván Gil, ante la Corte Penal Internacional (CPI), en La Haya, Países Bajos, expresó que Venezuela ha denunciado reiteradamente las acusaciones infundadas contra el país, que tienen un claro objetivo político y, además, buscan atacar con presuntos crímenes de lesa humanidad “que nunca han ocurrido”.
“Se pretendió utilizar la institucionalidad de la CPI para atacar políticamente a Venezuela por una acusación de crímenes de lesa humanidad, que nunca ocurrieron. Eran los tiempos de Donald Trump y su estrategia de cambio de régimen, en la que todas las opciones estaban sobre la mesa”, aseveró el canciller, durante la segunda audiencia en la CPI, prevista para la solicitud de apelación presentada por Venezuela.
Indicó que “desde el extranjero se han promovido acciones para atentar contra la estabilidad del país: intentos de golpe de Estado e incluso el magnicidio frustrado contra el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros. A lo largo de este proceso hemos compartido con la Fiscalía alrededor de 30 mil informes que dan cuenta del sostenido esfuerzo del Sistema de Justicia de Venezuela”, por garantizar los derechos de los venezolanos sin desigualdad ni discriminación.
“En Venezuela logramos evitar que tuviera éxito el plan de llevar al país a una guerra civil”, señaló, y en este sentido aclaró que “existen 255 agentes del Estado imputados y 64 acusados; de esto se desprende que la nación se han realizado las investigaciones de manera independiente. Lo que no puede pretenderse es que se construyan acusaciones infundadas para satisfacer intereses de actores externos e internos”.
Finalmente exigió que la República Bolivariana de Venezuela “sea tratada como Estado soberano, a quien se ha confiado el cumplimiento de su deber para poner fin a la impunidad”.
El Gobierno Bolivariano desmonta, de esta manera, los argumentos de la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) para solicitar la reanudación de la investigación sobre supuestas violaciones de los derechos humanos.