Vivian Polanía, la juez primero penal con función de control de garantías bacrim (bandas criminales), recordada por su particular estilo, se desnudó por completo. La jueza de Cúcuta lleva un estilo de vida fitness y diariamente sube a su cuenta en Instagram imágenes y videos donde muestra su escultural figura. Desde octubre del año pasado, cuando estalló una polémica por su estilo, la mujer ha recobrado mayor notoriedad.
RL / Idaed / Semana
En Vicky en Semana, la jueza Polanía, de 32 años de edad, dijo que cada quien era sexy a su manera y que, además de enviar fotos a redes, le gustan los tatuajes y los piercings. “Cuando llegué a Cúcuta yo me ponía shorts y camisetas, así es el look que más me gusta. Posteriormente yo conozco el CrossFit y practicándolo el cuerpo cogió otra forma”, explicó.
La jueza oriunda de Cúcuta contó su historia en Vicky en Semana y narró que inicialmente llegó a Cúcuta en condición de provisionalidad como juez primera penal del circuito y con el pasar del tiempo, por cuenta de su físico, algunas amistades le empezaron a manifestar que existían molestias entre algunas personas que hacían parte de su círculo laboral, específicamente por sus piernas. De acuerdo con Polanía, teniendo en cuenta las altas temperaturas en esa ciudad, no soportaba ponerse pantalones, por lo que recurría a otro tipo de vestimenta.
“Obtuve unos cambios en mi cuerpo que además son disciplina y me enamoré de este deporte (CrossFit). Obviamente uno cambia, me ponía vestidos, fue más la molestia. Lo intenté, de verdad, comprándome vestidos acorde a lo que la gente quería en palacio. No resistí”, explicó en Vicky en Semana.
De acuerdo con Polanía, aunque intentó vestirse con vestidos largos, elegantes, también se le convirtió en un problema, ya que le decían que se veía muy sexy y bonita, por lo que le mandaron a decir que debía andar con toga. “Me cansé de darle gusto a las personas por encima de mi tranquilidad. En el Palacio de Justicia no hay salas suficientes para hacer las audiencias y yo tengo una cantidad de trabajo impresionante, las hago en mis despachos, y se me enredaban los vestidos en la silla. Vestidos que valían un montón de plata”.
La juez Vivian Polanía aseguró en su momento que su caso llegó a ser tan mediático que terminó investigada. Polanía fue investigada de manera disciplinaria por una sesión de fotografías en vestido de baño, en su condición de juez.
“Me están investigando por el diario La Opinion y Qué hubo, que publicaron mis fotos de Instagram y sacaron un reportaje muy bonito. Para ellos esas fotos en vestido de baño van en contra de la dignidad de la administración de justicia”, aseguró en su momento.
Polanía también aclaró que su única fuente de ingreso es su salario como jueza de la república, al tiempo que señaló que mientras ha sido funcionaria no ha recibido dinero de nadie. “Creo que fue una situación que tenía que explotar. El karma; mientras yo estuve en el Palacio de Justicia, me conocen, soy una persona que hablo de frente, no invento chismes, no hablo mal de la gente (…) A mí me toca ser una mujer fuerte porque muchas personas creen que porque soy una mujer joven y ellos son de más edad y porque tienen corbata, creen que pueden aprovecharse y pasar por encima de uno”.
Además, contó que vive sola, se divierte en Instagram y que no cambiará su personalidad tan solo porque otras personas no están de acuerdo con su forma de ser. También dejó claro que seguirá haciéndose tatuajes porque le “encantan”, a tal punto que en este momento tiene plasmados en su cuerpo un total de 37.
“Una cosa es uno ser fuerte y pueden creer que yo soy muy joven pero yo llevo en la Rama Judicial desde los 18 años y eso a ti te da experiencia para ir viendo cómo va el discurso (…) Jamás he irrespetado a un colega o a un compañero, inclusive yo soy una persona que soy muy alegre. Yo de pronto en las audiencias me quito la toga, hago recocha con la Fiscalía, con los defensores, con los procesados. Somos personas”, aseveró.