Resulta interesante realizar algunas referencias iniciales sobre los partidos políticos venezolanos en la actualidad, sin que ello signifique una proyección a otros países latinoamericanos, aunque puedan existir similitudes con ellos. Según Lo dijo el analista político Baltazar Gutierrez.
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Se trata de perfilar algunos rasgos que los identifican hoy independientemente del contenido político o perfil doctrinario.
Independientemente de su pensamiento o credo político, ha operado un proceso de pragmatización en lo que han sido sus orientaciones fundamentales en ese amplio espacio a lo largo de su existencia. Incluso existieron las llamadas Secretarías de Formación y Doctrina, como núcleos internos de elaboración y difusión de contenidos de pensamiento, los cuales permeaban en toda la estructura de la organización. En ellas se creaban, revisaban y difundían las tesis respectivas del pensamiento en sus campos específicos.
Imperceptiblemente tales departamentos se fueron desdibujando. Las reflexiones de los dirigentes y equipos ya no eran permanentes tanto en materia interna como en la internacional.
El cuadro de corrientes de pensamiento en la actualidad es muy débil. Prevalece el pragmatismo, el acomodo a las circunstancias, la superficialidad, en resumen. La relación con partidos hermanos de otras latitudes luce imperceptible, la cual antes existía y era enriquecedora. Se daban encuentros, reuniones, congresos sobre ponencias y posiciones.
El proceso de actualización del sistema político venezolano pasa por la revisión de este cuadro descrito como resumen. Las generaciones jóvenes están en el deber de examinar todo este campo conductual dibujado a grandes rasgos, de cambiar las conductas descritas e ir hacia comportamientos más comprometidos con los valores que dan existencia a los partidos políticos y movimientos donde ellos actúan.
Los profesionales y técnicos estudiosos pueden jugar un papel estelar en trasladar el estilo acomodaticio, superarlo y convertirlo en una conducta de creación y de compromiso de cara a las nuevas realidades. Esta visión debe concretarse en todos los niveles de los partidos políticos nacionales.