La Sunacrip, de Venezuela, publicó una providencia para adaptar la normativa existente a las recomendaciones del Gafi, la cual incluyó la polémica “regla de viaje”, que exige que las operaciones superiores a 1.000 dólares o euros deben acompañarse de los datos personales del usuario..
RL / Idaed / Elnacional
Venezuela dio un paso más en la adopción de criptomonedas. Durante el 2021 el país, inmerso en una crisis económica, logro entrar entre los diez países con más visitas a páginas que intercambian criptomonedas.
Los venezolanos ven este mercado como una solución para las finanzas y capacidad de ahorro.
Algunos expertos en el mundo crypto aseguran que el país a principios del próximo año el uso de las moneas virtuales se disparará significativamente debido a todo el panorama económico y financiero que enfrenta.
Esta realidad quedó evidenciada en el informe publicado en octubre por Chainalysis, una firma internacional especializada en análisis de blockchain, el cual reveló que Venezuela se ubica en la séptima posición en el ranking de las naciones con mayor adopción de este tipo de activos.
“Es difícil saber (debido a la devaluación del bolívar) si un mayor porcentaje de la riqueza de los venezolanos en realidad se está moviendo hacia las criptomonedas incluso aunque la actividad comercial haya aumentado”, refiere el informe.
El estudio también reveló que en la medida en que el bolívar perdía terreno frente al dólar, el número de visitas a plataformas web de intercambio de criptomonedas como LocalBitcoins y Binance se incrementó casi 300%.
Normativa para acriptomonedas
El país ya dio un primer paso, y es que fue el primero en latinoamérica en desarrollar un marco legal específico para las criptomonedas.
El 30 de enero de 2019 entró en vigencia el decreto la Asamblea de Nicolás Maduro, sobre el Sistema Integral de Criptoactivos, una serie de medidas regulatorias establecidas para fiscalizar toda la industria de la criptomoneda en Venezuela.
Asimismo, el gobierno creó la Sunacrip, un ente regulador especial para supervisar las actividades conexas.
Estas acciones se concentraron entre 2018 y 2019, por lo que el presente año parece haber sido tranquilo en materia regulatoria.
A pesar de que en febrero se supo sobre una posible regulación que amenazaba la rentabilidad de la minería de bitcoin, una reunión entre las autoridades y la comunidad de mineros de criptomonedas pudo solventar la situación.
En el mes de abril la Sunacrip, publicó una providencia para adaptar la normativa existente a las recomendaciones del GAFI.
El documento incluyó la polémica “regla de viaje”, que exige que las operaciones superiores a 1.000 dólares o euros deben acompañarse de los datos personales del usuario.
Finalmente, en septiembre de este año, Sunacrip anunció su alianza con un organismo nacional contra la delincuencia organizada y el terrorismo.
Una medida tomada con el fin de avanzar en la lucha contra el lavado de dinero de criptomonedas.