Los próximos días serán cruciales para que la petrolera estadounidense Chevron pueda conocer qué actividades tendrá permitidas y cuáles otras prohibidas en sus operaciones en Venezuela.
Idaed / Efectococuyo
La nueva licencia emitida por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro tendrá que renovarse antes del 1° de junio y el texto final definirá el margen de acción para las negociaciones por venir con Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y con el resto de la administración de Nicolás Maduro.
La agencia internacional Reuters adelantó que el objetivo de las autoridades estadounidenses es que se tienda un puente con Pdvsa, aunque sin darle una autorización expresa a Chevron para que vuelva a las actividades de perforación, extracción y exportación de petróleo.
¿Qué dice la licencia vigente?
La actual licencia 8I emitida por la Ofac le prohíbe a Chevron actividades centrales como la perforación y la compra de cualquier petróleo venezolano y también la reparación o mejora de los pozos petroleros en Venezuela.
Otra de las prohibiciones establecidas para Chevron incluye la exportación de diluyentes a Venezuela, al igual que la contratación de nuevo personal o de servicios adicionales que no estuvieran destinados a la seguridad de sus activos.
La semana pasada se conoció que Chevron recibió un permiso especial para que vuelva a tender puentes con los representantes de Pdvsa y el resto de las autoridades venezolanas, pero todavía no está claro cuál será su margen de acción en el país para lo que resta del año.
Licencias con cambios
Desde que la administración de Donald Trump decidió emitir sanciones contra Pdvsa, las actividades que pudo realizar Chevron en el país variaron con el paso del tiempo.
En buena parte de los años 2019 y 2020, Chevron tuvo permitido continuar con sus operaciones petroleras en las empresas mixtas que mantiene con Pdvsa como son Petropiar en el sector de la Faja Petrolífera del Orinoco ubicada en el estado Anzoátegui y en Petroboscán localizada en el estado Zulia.
Durante esos meses, Chevron continuó con las operaciones para sacar adelante al mejorador de petróleo en Petropiar junto a Pdvsa. Esto permitió que se empezara a producir el crudo Merey, que ahora es la referencia de precio para la cesta petrolera venezolana, y que se produce a partir de la fusión de un crudo pesado y otro crudo más ligero.
En cambio, a Chevron y al resto de las empresas estadounidenses como Halliburton, Baker Hughes Holdings, Schlumberger Limited y Weatherford International dedicadas a la actividad petrolera solo se les permitió que continuaran con la preservación de sus activos durante el año 2021. Aparte de que se les autorizó para que hicieran los pagos a la nómina del personal en suelo venezolano y de los tributos nacionales.
El texto de la próxima licencia de operaciones para Chevron en Venezuela mostrará, en definitiva, qué tan avanzadas están las negociaciones con los Estados Unidos. Sin contar, además, que fijará qué tan rápido podrá la compañía estadounidense volver a operar directamente en los pozos petroleros venezolanos.