El año pasado no le dio chance de visitar la cárceles de Yaracuy, El Dorado y Trujillo. “El tiempo se nos hizo corto”, dijo la ministra para el Servicio Penitenciario, Mirelys Contreras sacando un calendario y escribiendo en fechas claves de la programación del 2022.
RL / Idaed / ultimasnoticias
En Marzo de 2021, el presidente Nicolás Maduro la felicitó públicamente por haber contenido la expansión del coronavirus en las 89 cárceles del país. A riesgo de contagiarse, Contreras visitó varios penales para constatar que se estuviera limpiando con cloro y otros químicos cada espacio, que vacunaran a toda la población penitenciaria (“estamos al 100%”) y que se aislara a quienes por asomo sintieran “una gripecita”.
Para este 2022, Contreras se propone profundizar la atención jurídica integral a los privados de libertad y con ello ganarle a eso que denominan “el retardo procesal”; es decir, presos que llevan años en una cárcel sin que los hayan llevado ante un juez o aquellos que aun teniendo la boleta de excarcelación siguen tras las rejas.
Reconoce que entre julio y septiembre del año pasado toda esa situación, angustiante por demás para los familiares del privado de libertad, recibió un empujón con la activación de la Comisión Especial para la Revolución del Sistema Judicial designada por el Presidente de la República después que el Consejo de Estado determinara la gravedad del mundo carcelario con visible hacinamiento en los retenes policiales, retardo en los juicios y el cobro irregular para dejarle ingresar una ración de comida a los reos, entre otros.
—Ministra usted habló recientemente de un Plan Estratégico 2022. ¿En qué consiste?
—Hemos estado trabajando de la mano con la Vicepresidencia Sectorial de Seguridad Ciudadana a cargo del Almirante en jefe Remigio Ceballos. A él presentamos el Plan con cinco líneas de acción: atención jurídica integral, infraestructura y transporte, seguridad y tecnología y formación y capacitación.
—¿Esa línea de Seguridad y Tecnología qué implica?
—Todo lo relacionado con seguridad interna (custodios) y el sistema tecnológico de seguridad penitenciaria. Tenemos establecimientos monitoreados en tiempo real a través del Sistema Tecnológico de Seguridad Penitenciario puesto en marcha en el año 2016.
—El Plan está pensado para cuántos privados de libertad?
—El año pasado trabajamos con una población promedio de 40.736 privados de libertad. Esa cifra fluctúa. ¿Por qué?, porque, así como tuvimos un buen trabajo con la Comisión Presidencial, también se atendió a los privados que venían de los centros de detenciones preventivas (retenes). Nosotros, a través de la Autoridad Única de Traslados otorgamos más de 10 mil cupos en las cárceles para presos que estaban en los centros de detención preventiva.
—¿En que ayudó la Comisión Presidencial en relación al hacinamiento en los retenes policiales?
—¿Qué permitió la Comisión?; que hubo en el año 2021, un total de 13.153 prelibertades y libertades plenas dentro de nuestro sistema. Entonces la población penitenciaria podía subir y bajar. Esto abarca la población de adolescentes.
—Esos 40.736 privados de libertad recluidos en cárceles ¿qué están haciendo actualmente: trabajan, estudian, tienen proyectos productivos?
—Nosotros tenemos un 98% de las cárceles con el Nuevo Régimen Penitenciario (estudio, trabajo y disciplina). Nos quedan pendiente ocho establecimientos que están en transición; ayer se cerró uno (Yare I).
—En materia de infraestructura, ¿se piensa construir nuevas cárceles?
—Nosotros pedimos en el Plan continuar con la construcción de los centros procesados judiciales iniciados cuando la diputada Iris Varela era Ministra. Se proyectaron seis en ese tiempo, solamente tenemos dos en Los Teques (Miranda) y San Juan de los Morros (Guárico). También teníamos pendiente hasta el año pasado la rehabilitación de 12 establecimientos penitenciarios que fueron clausurados y requieren reparación. Igualmente, la construcción y rehabilitación de centros de salud.
—¿Dónde estarán ubicados esos centros de salud?
—Hay un espacio en el hospital José Gregorio Hernández (Los Magallanes de Catia, Caracas), que quedó inconcluso. Es un espacio para atender a reclusos. También tenemos un espacio en la antigua Penitenciaria General de Venezuela donde se construirá un hospital para atender a pacientes con tuberculosis y otras enfermedades graves. En el Plan planteamos que se siga con el mantenimiento preventivo de los 89 establecimiento carcelarios.
—El año pasado la Asamblea Nacional reformó el Código Orgánico Penitenciario donde se establece que la Guardia Nacional Bolivariana ya no custodiará las áreas externas de las cárceles. ¿Ya fue creado el nuevo cuerpo que asumirá ese trabajo?
—Nosotros el año pasado recibimos las celdas ubicadas en el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim) y desde allí se empezó a trabajar lo ordenado en el Código Orgánico Penitenciario, es decir, la custodia externa con la Policía Nacional Bolivariana (PNB). Tenemos 12 establecimientos penitenciarios que ya cuentan con custodia externa de la PNB.
—¿Cuáles son esas cárceles donde la PNB asumió la custodia externa?
—Entre ellos tenemos el Ana María Campos I y II; Centro de Formación Hombre Nuevo Winnie Mandela (Zulia), Centro de Formación para Procesadas “La Crisálida” (Los Teques); Centro de Formación del Hombre Nuevo “Simón Bolívar” (Caracas); Centro de Formación Hombre Nuevo Libertador (Carabobo), Centro Penitenciario 26 de Marzo (Portuguesa). Tenemos dos años para esa transición de la GNB a la PNB.
—¿Cómo va el proceso de transición de esas 7 cárceles que aún no están bajo el denominado Régimen Penitenciario?
—Nos hemos fijado como meta la rehabilitación de 12 establecimientos y así se le presentó la Vicepresidencia Sectorial de Seguridad Ciudadana y ya se le está presentando al Presidente de la República.
—¿Cuáles son esos 12 establecimientos carcelarios?
—Ubicamos unas primeras que son importantes como la de Portuguesa, la de Nueva Esparta, los Rodeo (Miranda) y la “26 de Julio” en Guárico donde la construcción está en 75%. En la medida en que yo vaya generando plazas (cupos en cárceles), nosotros vamos a ir tomando el control de esos penales sin régimen. La idea es que el Ministerio asuma toda la población reclusa con Régimen Penitenciario.
—Volvamos con el tema de la Comisión Especial para la Revolución del Sistema de Justicia. ¿Qué balance hay hasta la fecha?
—En lo que fue el año pasado (porque este año estamos iniciando), tuvimos 13.156 prelibertades. Para nosotros fue un año bien positivo porque fue un gran número de egresados del sistema. Pero de la misma manera, nosotros a través de la Autoridad Única de Traslados aprobamos 10 mil cupos de los cuales se materializaron un aproximado de 6 mil, otros 4 mil están acopiando los requisitos. Para mí ha sido bastante positivo.
—¿La Comisión Especial abordará este año las cárceles nacionales?, tomando en cuenta que el año pasado abordó prioritariamente los retenes policiales.
—Desde la Asamblea Nacional hemos trabajando con algunos diputados y ellos dice que ya están preparando cronogramas de visitas. Nosotros estaremos atentos a esas visitas y prestar el apoyo que corresponde.
—En paralelo, el Ministerio a su cargo venía realizando las llamadas Cayapas Judiciales. ¿Este año prosigue ese plan de asistencia jurídica integral con la presencia de fiscales y jueces dentro de las cárceles?
—Claro; ya lo iniciamos este año con Yare I. Pudimos abordar el cierre de esa cárcel con una jornada de atención jurídica integral en coordinación con los órganos de administración de justicia. Allí tuvimos 10 días de atención con la participación de más de 30 jueces de Caracas y Miranda. Vienes otras jornadas similares en Cojedes, Aragua y Barinas.
—Para este año se tiene pautado la visita de organismos internacionales a las cárceles venezolanas?
—Ya tenemos varios años. Ellos tienen un cronograma con nosotros, tanto de la Oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidades para los Derechos Humanos como del Comité Internacional de la Cruz Roja. Este año ya ellos ingresaron al Centro para Procesados de Máxima Seguridad en la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim). Luego pidieron ir al Rodeo y a las cárceles de Lara. Lo que ellos vayan solicitando se coordina a través de Cancillería. Que vayan y vean cómo es nuestro trabajo y vean que hay un trabajo que garantiza los derechos humanos de los privados de libertad.
—¿Estos organismos han hecho alguna observación al Ministerio derivado de esas visitas?
—Siempre hacen muy buenos reconocimientos. Reconocen al sistema penitenciario. Son muy pocas las recomendaciones. En equipo las evaluamos. A veces solicitan que les permitan visitar más cárceles. Nosotros respondemos que por seguridad deben ser dos visitas al mes.
—Usted habló de la existencia en la Digcim de áreas de máxima seguridad. Eso significa que hay privados de libertad en ese establecimiento aun cuando el presidente Nicolás Maduro entregó la custodia de esos reclusos al Ministerio Penitenciario.
—Desde que el presidente Maduro ordenó esa transición, esa transferencia, nosotros asumimos toda la responsabilidad. Allí hay personal nuestro; pero lo único es que ellos (reclusos) están dentro de las instalaciones que estaban allí. Pero todo lo que corresponde a la atención está directamente a cargo del Ministerio del Servicio Penitenciario.
—¿Se ha presentado algún conflicto en ese proceso decretado por el Jefe de Estado?
—Yo tengo muy buena fama de trabajar con todo el mundo. Hemos hecho un buen equipo. Cuando me dieron esa responsabilidad me reuní con el mayor general Hernández Dala y González López, director del Sebin. Después que conversamos todo se ha llevado en equipo. Siempre le pido las orientaciones a ellos porque tienen sus conocimientos y máximas de experiencia en materia de seguridad. Cuando se trata pedir una orientación soy muy humilde.
—¿Cómo está el tema de la alimentación de los privados de libertad?
—Avanzamos el año pasado; hicimos un gran esfuerzo de equipo, de mucha armonía. El año pasado los privados de libertad estuvieron muy bien alimentados. He buscado mecanismos: apoyo con gobernaciones, alcaldías y el Ministerio de Alimentación que nos ha dado un gran respaldo. Los recursos propios que hemos tenido los hemos sabido administrar para que los privados de libertad puedan tener una buena alimentación.
—Es decir que usted puede decir que los privados de libertad no están pasando hambre.
—Claro. Por lo menos le garantizamos lo que exigen las normas internacionales que son 2.400 calorías. También nosotros autorizamos el ingreso de insumos por parte de la familia. Todo eso les permite a ellos estar más tranquilos.
—En cuanto a la pandemia: ¿cuál es el balance hasta el momento dentro de las cárceles?
—Desde que inició la pandemia, estando de ministra la actual diputada Iris Varela, se tomaron todas las medidas de bioseguridad y de aislar a aquellos privados de libertad que se contagiaron. Se atendían rápidamente y no pasaba de allí. Evitamos la propagación. No ha habido un contagio masivo que haya generado una situación difícil. Al contrario, hemos estado muy organizados en ese aspecto a través de la Dirección de Salud. El año pasado tuvimos el apoyo del Ministerio de Salud para que toda la población privada de libertad fuera vacunada la primera y segunda dosis.
—¿Todos los privados de libertad están vacunados con su primera y segunda dosis más de la tercera de refuerzo?
—Toda la población penitenciaria se vacunó contra la Covid-19 y también los funcionarios que laboran en los establecimientos. La tercera aún no. Tiene que organizarse. Hemos estado protegidos.
—¿Qué se está produciendo en las cárceles?. Se lo pregunto porque en años anteriores reseñamos las cosechas de cereales, la cría de cachamos, cerdos y aves, entre otros.
—El año pasado nombraron al viceministro Kevin Ávila encargado del Instituto Autónomo de la Caja de Trabajo. Él ha venido haciendo un recorrido, inspeccionando. Ya tenemos una nueva panadería aquí en la sede principal del Ministerio Penitenciario. Entre sus planes de trabajo tiene el proyecto de panaderías en los establecimientos penitenciarios que sirva para la población reclusa y las comunidades.
—Y la producción de proteicos: aves, cerdos, entre otros.
—También se tiene previsto un proyecto con gallinas ponedoras. Tenemos en Tocuyito más de 900 gallinas ponedoras. Las estaban sacando porque ya habían terminado su proceso, su ciclo; las vendieron, pero van a retomar nuevamente el proyecto. Igualmente tenemos proyectado la cría de pollos, cerdos.
—Digamos que lo nuevo en esos proyectos es la venta de pan al público vecino de las cárceles.
—Si. El viceministro Kevin Ávila me informó que para este primer trimestre tiene proyectado activar cuatro panaderías, entre ellas Barinas y Carabobo.
—Las cárceles han estado tranquilas, sin motines violentos con saldo de muertos y heridos. ¿Eso es así?
—Sí. Desde el Ministerio Penitenciario hemos atendido con bastante sensibilidad a todos los privados de libertad y eso ha contribuido a generar un clima de paz. En estos días viene la VI edición del Festival Nacional de la Voz Penitenciaria que se iniciará en la región capital.
Allí los privados de libertad compiten en varios géneros musicales.
—¿En las entidades de atención a los adolescentes en conflicto con la ley penal también se aprecia ese ambiente de paz?
—En esas entidades siempre tenemos múltiples actividades educativas, recreacionales y laborales. Recientemente celebraron el día de la amistad con intercambio de tarjetas y jabones elaborados en esas entidades. Eso les ayuda a los muchachos a comprender que dentro de esos establecimientos el valor de la amistad es un instrumento muy poderoso para alejarse de lo malo e incorporarse a la sociedad. Así lo han entendido. L
Al detal
- “El cierre de Yare I fue bien positivo. De 779 reclusos solamente fueron asignados a penales abiertos, es decir, sin Régimen Penitenciario, 170 privados de libertad. Del resto, todos fueron para establecimientos con Nuevo Régimen basado en trabajo, estudio y disciplina”, declaró la ministra para el Servicio Penitenciario, Mirelys Contreras.
- Para este año se tiene previsto retomar el plan de atención a los privados de libertad. En ese sentido, la ministra Contreras adelantó que realizarán una jornada de atención a las “Maítas” del estado Monagas.
- La atención a familiares de privados de libertad tiene otra modalidad, explicó la Ministra. Para ello dispusieron líneas telefónicas directas: 0800 INTERNO 0800-4683766 y 0800 INTERNA 0800-4683762. Además del correo ‘denunciafamilia2021@gmail.com.
- El Plan Pasos de Libertad es otro de los proyectos que ya fue retomado este año, para atender a los reos que se encuentran en los centros de detención preventiva, conocidos como retenes policiales o militares.