En la época soviética de Joseph Stalin que gobernó de 1925 hasta su muerte en 1953 se produjo una represión inimaginable, entre 1936 y 1938 se realizaron los Procesos de Moscú (la gran purga) que consistió en el asesinato de la disidencia; oposición de izquierda, socialistas, anarquistas y miembros del partido comunista,
Más de un millón de personas fueron fusiladas, 4 millones enviados a campos de trabajo, cerca de seis punto cinco millones deportados, cualquiera que diera muestras de ser un opositor era señalado como traidor a la patria o enemigo del pueblo, mismos conceptos utilizados por la narcodictadura de Nicolás Maduro para enjuiciar a los opositores.
Para realizar la represión, Stalin organizó la NKVD (el comisariado del Pueblo para los Asuntos Internos de la Unión Soviética), después de la muerte de Stalin se convirtió en la temible KGB.
No es de extrañar que uno de los pocos aliados con los que cuenta Maduro sea el presidente de la Federación Rusa (ex-URSS) Vladimir Putin, antiguo miembro de la KGB con funciones en la Alemania Oriental comunista y responsable de la muerte de decenas de ciudadanos alemanes que trataron de saltar el muro de Berlín.
El régimen de Maduro ordena el 12 de agosto de 2019 eliminar la inmunidad parlamentaria a cuatro diputados de la Asamblea Nacional señalándolos como traidores de la patria y enemigos del pueblo, siendo ellos: José Guerra, Juan Pablo García, Tomás Guanipa y Rafael Guzmán, los cuales se suman a la lista de los 30 diputados perseguidos y encarcelados durante los últimos 3 meses.
Al respecto José Guerra afirma: “Traidores a la patria son ustedes que endeudaron este país y no pueden pagar la deuda, que acabaron con la economía nacional, que se robaron el dinero público y desfalcaron a la nación”.
La crisis de Venezuela es devastadora, hay una escasez permanente de alimentos, medicinas, agua, energía eléctrica y una crisis regional de refugiados que ya suma 4 millones de personas que han huido por la represión, el hambre y la faltad de salud, el madurísimo ha destruido la economía, y son los agentes del narcotráfico, la corrupción y el lavado de dinero.
Cada día que pasa, la tiranía venezolana huye hacia adelante, las sanciones impuestas por Estados Unidos a los jerarcas chavistas han alejado las posibilidades de una solución negociada, se retiraron del diálogo y están reprimiendo a la oposición y a la disidencia chavista con crueldad; el general Miguel Rodríguez Torres, segundo en el mando en los tiempos de Hugo Chávez, está incomunicado y es torturado todos los días, el fanatismo ideológico de Nicolás Maduro y sus seguidores de provocar sufrimiento a los venezolanos no parece tener fin.
En 1956 Nikita Jruschov, secretario general del partido comunista de la URSS, defendió ante el XX Congreso del Partido un informe en el que denunciaba los crímenes y errores de la época de Stalin, el culto a la personalidad y el dogmatismo ideológico, se inició así el proceso de la desestalinización de la Unión Soviética, en 1961 hizo que el XXII Congreso del Partido condenara oficialmente a Stalin.
Los que nos identificamos con la democracia y la libertad esperamos que la tragedia venezolana termine pronto y los futuros gobernantes condenen y repudien esta historia negra del chavismo madurísimo, así como lo hizo Jruschov con el estalinismo.