Los juicios telemáticos empiezan abrirse paso en nuestro país pese a que hay un debate abierto entre los defensores de esta forma de ejercer justicia, y aquellos otros que no ven que el sistema pueda ir adelante.
El viernes pasado el Juzgado de Primera Instancia 5 de Alicante impulsó cuatro juicios telemáticos sobre cláusulas suelo.
Y según ha trascendido en los próximos días quiere realizar su titular, José María Aparicio, otras 52 vistas.
Con anterioridad, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Elche celebraba el pasado 1 de junio los primeros juicios íntegramente telemáticos de la Comunidad Valenciana; 9 vistas orales por videocoferencias.
Todos ellos se celebran siguiendo las recomendaciones contenida en la “Guía para la celebración de actuaciones judiciales telemáticas” en el que ofrece pautas y recomendaciones para llevar a cabo los juicios y que fue aprobada el pasado 27 de mayo por la Comisión Permanente del Consejo General del Poder Judicial.
La Comisión Permanente del CGPJ aprueba la Guía para la celebración de juicios .
La jueza de adscripción territorial (JAT), que sirve como refuerzo en este órgano judicial, Raquel Catalá, acordó la celebración telemática de estos nueve juicios con el visto bueno de demandantes y demandados.
Las vistas guardaban relación con recursos en materia de extranjería, reclamaciones de funcionarios de administraciones públicas y contrataciones y pago de facturas de ayuntamientos
En la jurisdicción social también ha llegado esta tendencia de juicios telemáticos.
Una jurisdicción muy cargada de actividad y que ahora con la resaca del COVID-19 tendrá que sacar muchos asuntos relacionados con ERTE, reclamaciones de cantidad o prestaciones de Seguridad Social.
Este próximo martes, el Juzgado de lo Social 4 de Alicante, del que es titular la magistrada Paz Fernández, realizará su primer juicio telemático.
De momento se desconoce el asunto en cuestión, aunque las fuentes consultadas por Confilegal señalan que la idea es a corto plazo fijar otros asuntos.
Este Juzgado ya realizó una prueba telemática para testear el sistema con el que se pretende evitar aglomeraciones de profesionales y ciudadanos.
En esa prueba estuvieron presentes virtualmente tanto la Presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), Pilar de la Oliva, la secretaria de la Sala de Gobierno, Gloria Herráez, diversos magistrados de la Sala de lo Social del TSJCV de Valencia así como Jose María Alcamí, jefe de Servicio de Informática de la Consellería de Justicia.
Igualmente participaron letrados, los responsables jurídicos de distintos organismos públicos y graduados Sociales y permitió que todos ellos se familiarizaran con esta útil herramienta, apreciando sus indudables ventajas y beneficios.
PRUEBAS EN EL JUZGADO DE LO SOCIAL 4 DE ALICANTE
En vísperas de este bautizo telemático,la magistrada Hernández explica a Confilegal que el uso de esta tecnología digital “esuna herramienta necesaria e imprescindible para poder reorganizar la Agenda de señalamientos de este Juzgado”.
A su juicio, “de esta manera se evita la concentración de asistentes presenciales, se maximiza la utilización de la Sala para aquellos juicios en que no sea posible acceder a la vía telemática y se garantiza la protección de la salud de las personas. Al mismo tiempo se maximizar y rentabilizar el tiempo y simplifica mucho la celebración de los juicios”.
Hernández reconoce que con el COVID-19, para prevenir el contagio. la celebración de juicios presenciales será muy inferior al que se viene celebrando.
“La previsión de juicios telemáticos se recoge en el Protocolo para la Reactivación de la actividad judicial y adopción de medidas de salud profesional para la prevención de contagios en sedes judiciales, aprobado por el CGPJ en fecha 29 de abril de 2020 y la premier renovación de 14.05.20”, recuerda la magistrada.
Al mismo tiempo señala que “el procedimiento a seguir para la celebración de actos de forma telemática se ajustará a las pautas establecidas en la guía de celebración de actos procesales telemáticos ya aprobada por la Comisión Permanente del CGPJ”.
La magistrada Hernández es “totalmente partidaria del uso de la tecnología en su quehacer diario. Hay que aprovechar los beneficios que aportan. Así lo hemos visto durante el estado de alarma, que han continuar desarrollando la actividad judicial de muchos jueces y magistrados mediante el “teletrabajo”, al disponer de acceso a todas las herramientas informáticas a través de un control remoto (VPN), que se puso a disposición de los miembros de la carrera judicial por parte de la Dirección General de Justicia de la Generalitat Valenciana”.
EL JUEZ DEBE HACER EL JUICIO TELEMÁTICO DESDE EL EDIFICIO JUDICIAL
Admite que este tipo de procedimientos genera ciertas exigencias, entre ellas “conciliar la práctica de las actuaciones judiciales telemáticas con los principios y garantías procesales, entre ellas la relativas a la publicidad, confidencialidad, derecho de defensa e intangibilidad de los medios de prueba, como expresamente se recoge en la Guía para la celebración de actuaciones judiciales telemáticas aprobada por el Consejo General del Poder Judicial”.
Al mismo tiempo destaca que “en las actuaciones procesales realizadas por medios telemáticos, el artículo 19.1 del Real Decreto-ley 16/2020, de 28 de abril, de medidas procesales y organizativas para hacer frente al COVID-19, exige que el juez o tribunal esté constituido en sede”.
También remarca sobre que “la publicidad de los juicios se garantiza mediante un denominado ‘tablón de anuncios virtual’ en el que constará la información relativa a la fecha y hora de celebración, tipo de actuación y número de procedimiento”.
“En el ámbito de la Comunidad Valenciana, la Dirección General de Justicia está estudiando la posibilidad de que terceros puedan asistir a tales vistas telemáticas, una vez se acredite el mismo, mediante un sistema de ‘streaming’, si bien con limitaciones relativas al tratamiento de datos de carácter reservado y confidencialidad derivada de las exigencias de la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales”, aclara.
En cuanto a los asuntos que pueden adaptarse a este entorno virtual cuenta que “son aquellos más sencillos de celebrar. Aquellos en que intervienen organismos públicos y en materia de Seguridad Social y desempleo, que precisan poca prueba, fundamentalmente documental, y en los que existan pocos intervinientes”.
También ve que pueden celebrarse “juicios mixtos, con presencia en sede judicial para la declaración de los testigos o peritos”, apunta.
Los antecedentes en la jurisdicción social han sido prometedores. Este pasado viernes en Córdoba, Antonio Rodríguez, titular del Juzgado de lo Social de Córdoba celebraba seis juicios telemáticos.
Los juzgados de lo Social también están viendo en estas vistas virtuales una forma de solventar ciertos asuntos.
Se han celebrado tres sobre Seguridad Social y tres de despidos que se han conciliado.
El magistrado, en su cuenta de “Twitter”, señalaba que “a ver si ahora las nuevas tecnologías van a impulsar las fórmulas alternativas de resolución de conflictos”.
Hace unos días, el Juzgado de lo Social de Huelvaacogía dos juicios virtuales relativos a dos impugnaciones de altas médicas a la Seguridad Social y, solo la magistrada correspondiente y una funcionaria estuvieron, de modo presencial, en la sala de vistas.
También el Juzgado de lo Social 10 de Las Palmas de Gran Canaria y su titular, Javier Ercilla, impulsaba, el pasado 29 de mayo, ocho juicios telemáticos.
Ahora este magistrado quiere convertir el viernes en el día de los juicios telemáticos.
Ercilla está muy vinculado al mundo tecnológico. De hecho, es autor de varios libros entre ellos “La robotización como causa técnica de despido objetivo”, publicado por Aranzadi, que acaba de salir al mercado, donde ya aventura el problema de la adaptación a la tecnología y como puede convertirse en despido.
“Hace tres semanas hice un juicio, con testigos presenciales. El siguiente fue un conflicto colectivo por vía telemática. Y en esa semana celebramos ocho vistas ‘online’, todas ellas relacionadas con prestaciones de la Seguridad Social, donde la prueba documental es notable y relativamente sencillos. La experiencia ha sido positiva”.
Para Ercilla “la clave de este tipo de asuntos es que funciones la parte tecnológica y que las dos partes se puedan ver. En lo Social la prueba se presenta en el acto, con lo cual es bueno hablar con ellos para pedirles que presenten estas pruebas documentales antes de la vista, pese a que no está previsto procesalmente”.
Este magistrado reconoce que la pandemia del COVID-19 ha reducido el número de juicios a celebrar presencialmente. Antes celebraba entre 15 y 20 diarios; ahora sólo puede celebrar 10 por problemas de aforo.
Cada magistrado en nuestro país señala juicio cuando puede porque casi siempre comparten sala. “Eso significa que ya estemos fijando agenda para el 2021”.
NO TODOS LOS CASOS PUEDEN CELEBRARSE POR VIDEOCONFERENCIA
Ercilla recuerda que no todos los asuntos de lo Social pueden ir a la vía telemática.
“Cuando hay pruebas presenciales o testificales amplias difícilmente se puede hacer telemático. Pero si la contestación es breve y la prueba es documental lo celebramos vía ‘online’”.
En cuanto a los asuntos que mejor se adaptan a dicha tecnología, Ercilla aclara que “son asunto de poca prueba presencial. Podemos hablar asuntos de conflicto colectivo en la interpretación de artículos, reclamaciones de cantidades con prueba documental y los de prestaciones de Seguridad Social donde hay un par de periciales añadidas”.
Este Juzgado de lo Social de Las Palmas emplea la tecnología Cisco Webex, ya vista también en la Comunidad Valenciana como herramienta para gestionar este tipo de asuntos.
“Los testigos deben ser presenciales, mientras que partes y peritos puede incorporarse telemáticamente”, aclara.
Sobre el debate abierto en la judicatura respecto a estos juicios telemáticos, Ercilla señala que es un escenario parecido a cuando se plantó en 1855 y 1881 pasar de la escritura a la oralidad en las vistas.
“La Ley de Enjuiciamiento Civil 1/2000 ya planteo la oralidad de los procedimientos como algo habitual. Los que defendieron a la escritura serían ahora lo que defienden la presencialidad de los asuntos”, recalca.
En este debate “hay una parte de la carrera judicial que esta en contra porque ve que faltan garantías a los procedimientos; otra donde nos encontramos muchos jueces que no está en contra, pero advierte que hay muy escasos medios para hacer procedimientos con plenas garantías. Y los que están a favor de dichos procedimientos telemáticos”, concluye.
CL
