Las reservas de oro en poder del Banco Central de Venezuela cayeron mil millones de dólares en el primer semestre de 2019, según mostraron datos oficiales publicados esta semana, en medio de acusaciones de la oposición de que el gobierno está vendiendo el metal precioso en el extranjero para aumentar los ingresos frente a las sanciones de Estados Unidos.
El valor de los lingotes de oro en las bóvedas del Banco Central de Venezuela cayó a 4,62 mil millones de dólares, un 18,5% menos que los 5,67 mil millones de dólares contabilizados a finales de 2018, el ratio más bajo en 75 años, según datos bancarios publicados por Reuters.
Los líderes de la oposición han acusado durante meses al gobierno del presidente Nicolás Maduro de retirar el oro para venderlo en el extranjero, ya que las sanciones financieras de los Estados Unidos han paralizado las exportaciones de petróleo y han bloqueado su préstamo al exterior.
La caída corresponde a una disminución de 26,36 toneladas de oro de las reservas, dejando al banco con aproximadamente 102,40 toneladas. Alrededor de un tercio de esa cifra está en las bóvedas del Banco de Inglaterra.
El año pasado, el gobierno de Maduro comenzó a exportar oro a Turquía, producido por mineros ilegales en las selvas del sur del país bolivariano. El valor del oro del banco central ya había caído en mil millones en la segunda mitad de 2018, según las reservas bancarias.
A pesar de las sanciones de la administración Trump y la presión sobre los comerciantes para que no compren oro venezolano, más de 16 toneladas dejaron las bóvedas bancarias de Caracas con destinos desconocidos, según legisladores y funcionarios del gobierno de Maduro.
Dos fuentes del gobierno indicaron esta semana que el banco comenzó nuevamente a sacar oro de las arcas estatales en agosto, y agregaron que han sido enviados soldados a la sede del BCV en los últimos dos meses alegando motivos de seguridad,