Es tan profunda la comunión entre los terroristas y Miraflores que el propio presidente Iván Duque lo denunció en julio pasado. A lo que Nicolás Maduro contestó: “Son bienvenidos cuando quieran venir”.
na nueva alianza se asoma en América Latina. Estaría conformada en principio por la facción clandestina de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). De lograr éxito en su armado, el canto de sirena llegará hasta el Palacio de Miraflores, cuyo patrón,
Iván Márquez -el hombre que supo ser el nexo de la decana milicia colombiana con el gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos durante las conversaciones de paz en La Habana, Cuba– rompió el trabajado pacto en la madrugada de este jueves jueves. Lo hizo público por medio de un video en el que aparece rodeado por otros popes de la guerrilla. En él, anunció la vuelta a las armas.
En la grabación se podían ver a dos personajes históricos de la organización: Jesús Santrich y Hernán Darío Velásquez, El Paisa. Ambos tienen cuentas pendientes con la justicia. El primero por sus vínculos con el narcotráfico; el segundo fue uno de los comandantes más temidos de la milicia que lograba conquistar grandes territorios merced a su ferocidad y determinación, reseñó Infobae.
Márquez, quien desde hace un año pasó a la clandestinidad, anunció además que intentará un acercamiento con la única banda armada que hasta ayer permanecía activa en Colombia: el ELN.
Dirigido actualmente por Nicolás Rodríguez Bautista, Gabino, es considerado grupo terrorista por el gobierno local, Perú, Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea. Mantiene una comunicación fluida con el castrismo desde su fundación en 1964 y desde hace unos años practicó un acercamiento con el chavismo.
Esa proximidad se convirtió en alianza tácita en los últimos años. Sobre todo en meses recientes. Tanto es así que muchos elementos del ELN penetraron en territorio venezolano con la absoluta pasividad de parte de las autoridades de Venezuela. La frontera, en algunas zonas desiertas de estado, fueron apropiadas.
Es tan profunda la comunión entre los terroristas y Miraflores que el propio presidente Iván Duque lo denunció en julio pasado, durante una entrevista dada a la agencia de noticias EFE. “En territorio venezolano Nicolás Maduro, el dictador de Venezuela, los está protegiendo. Les está dando dinero y
está patrocinándoles el reclutamiento de niños para ejercer la minería ilegal en lugares del territorio venezolano“, denunció entonces el jefe de estado colombiano.
Como consecuencia de ese financiamiento ilegal, el ELN podría conseguir las herramientas necesarias para expandirse en su territorio natural. Es así como planea controlar los departamentos de Chocó, Antioquia, Arauca, Bolívar y Norte de Santander. El primero de ello, clave para el tráfico de estupefacientes.
Fuentes de inteligencia de Colombia indicaron además que la grabación del mensaje no se realizó desde el Río Inírida, sino desde algún punto de la selva fronteriza venezolana.
Maduro es un anfitrión generoso. Hacia fines de julio había mostrado su predisposición: “Son bienvenidos cuando quieran venir“, advirtió. Al ELN le otorgó permisos -no escritos- para formar a los colectivos chavistas, en el límite con el vecino país. Ahora, algunas de estas bandas al servicio del Gobierno venezolano reciben entrenamiento y disciplina por parte de los guerrilleros colombianos.
