Cuando más de 210.000 mujeres son víctimas cada año de violencia física o sexual por parte de su pareja en Francia, el parlamento francés se dispone a adoptar definitivamente la pulsera ‘antiacercamiento’ para mantener alejados a los violentos.
El Senado francés dará luz verde a una propuesta de ley, después de que la Asamblea Nacional votara a su favor la semana pasada casi por unanimidad. El número de feminicidios en Francia este año superó al registrado en 2018 por el gobierno, con 122 casos confirmados, según un recuento de la AFP.
La medida esencial del texto es la adopción de la pulsera ‘antiacercamiento’, defendido como “un sólido avance” que “salvará vidas”, según el diputado de los republicanos (derecha) Aurélien Pradié, en el origen de la propuesta de ley.
La pulsera, que ya existe en España, donde los feminicidios han disminuido de forma significativa, permite geolocalizar y mantener a distancia a las parejas o exparejas violentas gracias a la activación de una señal.