Gobierno de Venezuela usa la plataforma del Petro para rastrear operaciones de sus ciudadanos. El esquema está diseñado para favorecer al gobiernos, mientras los comerciantes y ciudadanos pierden.
El Petro fue lanzando y re-lanzando como una solución casi milagrosa contra las sanciones de los Estados Unidos y la inflación. Cuando el gobierno de Venezuela lanzó su moneda digital en el 2018, parecía estar en la vanguardia de la innovación. Sin embargo, casi dos años después el Petro es solo una herramienta de control para la población.
El Petro es todo lo que se opone al Bitcoin
Eduardo Gómez, Jefe de Soporte para la empresa Purse.io (una plataforma que permite usar Bitcoin y Bitcoin Cash para ahorrar en compras en línea) hizo una evaluación sobre el Petro. Primero se refirió al «carnet de la patria», un documento de identificación y monitoreo que permite que los ciudadanos reciban subsidios del gobierno.
La plataforma del «carnet de la patria» se ha convertido en parte de un esquema Orwelliano de control y vigilancia.
El gobierno usa la plataforma para rastrear y determinar exactamente quién recibe cuál subsidio. Además, se usa para hacer chequeos periódicos sobre los integrantes de una familia para alimentar una base de datos gubernamental.
Gómez explica en su cuenta de Twitter que dicha plataforma tiene un exchange que ha sido incorporado para «comerciar con Petros». En noviembre, el gobierno anunció que haría un «airdrop» a pensionados y empleados de 0.5 PTR como un bono navideño.
El alcance de la decisión se extendió a todos las personas inscritas en la plataforma del «carnet de la patria».
Como dice Gómez, solo pocos comercios selectos tienen el sistema para procesar pagos en Petros (traducido libremente):
Los comerciantes están obligados a aceptar el Petro como pago a una tasa fija. (2.5 millones de VES/PTR), mientras que usted puede comprar el token en el mercado abierto por tan sólo 1 millón de VES/PTR.
Gómez explica cuáles son las consecuencias de este sistema. Si las personas pueden comprar el Petro y obtener una ganancia superior al 50% para gastarlo en lugares específicos, debería aumentar la presión de compra hasta lograr un equilibrio en el precio del Petro.
Por lo tanto, los comercios que están obligados a aceptar Petro serán incapaces de reponer sus inventarios y tendrían que cerrar sus servicios. Gómez indica con precisión quienes serán los mayores beneficiados de este esquema: los oficiales del gobierno que viertan sus Petros en el mercado (traducido libremente):
Sin mencionar la increíble operación de lavado de dinero que tienen en marcha con este asunto.
Aunque se pueden ver largas filas para gastar el token, los ciudadanos son los que pierden en el largo plazo. Por ahora, en la plataforma de intercambio del Petro no hay ordenes de compra para la moneda digital. La tendencia podría revertirse, pero sin las garantías necesarias la mayoría de la población no invertirá en el Petro.
Nivel de volumen de comercio con Bitcoin alcanza nuevo récord en Venezuela
Mientras el Petro se impone para incrementar el poder de control del gobierno, el Bitcoin sigue consolidándose como alternativa a la crisis económica y a los controles. La criptomoneda número uno en capitalización ofrece todas las garantías y beneficios que el Petro no.
Como reportó CNF, la plataforma de datos CoinDance registró un nuevo récord en el volumen de comercio de Bitcoin en Argentina y Venezuela. La semana pasada, se comerciaron 250 billones de bolívares (VES) en el intercambio peer-to-peer LocalBitcoins. Esto representa un incremento del 15% con respecto a la semana anterior, para ubicarse en 24 millones de USD.
El volumen de comercio sigue aumentando desde noviembre. Es altamente probable que la tendencia se mantenga y se incremente dependiendo de la crisis. Venezuela es uno de los países con mayor inflación en el mundo y sus ciudadanos se han volcado a monedas extranjeras y al Bitcoin como una alternativa para realizar operaciones cotidianas y deposito de valor.
El precio del Bitcoin se ubica en $ 7.342 USD, al momento de publicación, con un movimiento lateral a la baja (0.22%) en las últimas 24 horas.