El político Gabriel Boric, escogido como nuevo presidente de Chile, prometió “expandir los derechos sociales” pero con “responsabilidad fiscal”, en su primer discurso tras ser electo, ante unas 100.000 personas.
IDAED / Diario Las Américas.
“Vamos a expandir los derechos sociales y lo haremos con responsabilidad fiscal. Lo haremos cuidando nuestra macroeconomía”, agregó el presidente electo, que en su programa promete una reforma fiscal para recaudar un 5% adicional del PIB que inquieta a sus detractores.
“Lo haremos bien ya que aquello permitirá mejorar las pensiones y la salud sin que posteriormente tengamos que retroceder”, agregó el diputado, que con 35 años se convertirá a partir del próximo 11 de marzo en el presidente más joven en la historia de Chile.
Boric, que inició su carrera política en 2011 como dirigente estudiantil y luego como diputado a los 27 años, llegará a la presidencia tras ganar en mayo una primaria de la izquierda en la que compitió con el comunista Daniel Jadue.
Bajo la coalición Apruebo Dignidad -que reúne al Frente Amplio y al Partido Comunista-, logró en la primera vuelta el 25,8% de los votos. De cara a la segunda vuelta, consiguió agrupar bajo su candidatura a toda la centro izquierda una vez que moderó su propuesta, sobre todo la económica.
Inicialmente su programa, que busca asegurar un plan universal de salud y terminar con las privadas administradoras de fondos de pensiones (AFP), establecía una reforma tributaria que recaudaría el 8% del PIB, la que luego rebajó a un 5% durante sus cuatro años de gobierno.
El joven diputado destacó, además, que a lo largo de su administración -que se inicia el 11 de marzo- tendrá un “congreso equilibrado”, tras la conformación paritaria entre las fuerzas de la izquierda y la derecha.
“Eso es una realidad. Lo que significa una obligación y una invitación a dialogar”, agregó.
“Será difícil, pero vamos a ir avanzando con pasos cortos pero firmes”, acotó ante una multitud, que su comando calculó -sólo en la parte central- en unas 100.000 personas.