La alta demanda de oxígeno medicinal en Venezuela por el aumento de casos de COVID-19 llamó la atención del régimen de Maduro que giró instrucciones a la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) de supervisar la comercialización de oxígeno.

EB / Idaed / albertonews

“El equipo del Ministerio de Comercio realizó una videoconferencia con los coordinadores estatales de la Sundde para girar instrucciones de supervisar la comercialización del oxígeno medicinal en territorio nacional”, escribió Eneida Laya, ministra de Comercio del chavismo.

Explicó que la medida se hará para “evitar distorsiones económicas”, sin embargo, no ofreció mayores detalles sobre el tema.

Un gran número de personas han optado por cumplir el tratamiento contra el virus en casa, y en muchas ocasiones requieren de oxígeno para poder superar la enfermedad.

En Caracas el alquiler de una bombona de oxígeno oscila entre los 150 y 200 dólares, mientras que el llenado puede costar hasta 30 dólares.

El costo para comprar la bombona puede variar entre 390 dólares hasta 1.600 dólares por unidad.