Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, confirmó este jueves 05 de agosto que su país será la sede de diálogo entre el gobierno del Presidente Nicolás Maduro y la oposición bajo la mediación de Noruega.
Idaed / El Universal.
“Me acaba de informar el secretario de Relaciones (Exteriores) que a propuesta de Noruega se propone que México sea sede para llevar a cabo estas negociaciones y nosotros aceptamos”, dijo el mandatario durante su habitual conferencia matinal, reseñó AFP.
“Son pláticas del Gobierno de Venezuela y la oposición. Ojalá y se logre un acuerdo”, agregó.
En junio pasado, la cancillería mexicana informó que impulsaba con Noruega el diálogo político en el país sudamericano aunque aún no definían dónde se llevaría a cabo.
El 24 de julio, Maduro dijo que esperaba que la mesa se instalara en México en agosto y que “posiblemente” contaría con la participación del gobierno de Estados Unidos.
“Sí van a llevarse a cabo estas pláticas y nosotros ayudamos para que nuestro país sea la sede de estas conversaciones”, ratificó López Obrador, quien se excusó de dar detalles sobre la fecha de la reunión.
Sobre las negociaciones, Maduro ha dicho que se prevé una “agenda compleja, difícil”, pero que ya se han sentado las bases del arranque del diálogo.
El gobernante venezolano ha expresado en otras oportunidades su disposición a dialogar con la oposición que lidera Juan Guaidó.
Maduro había condicionado su participación al levantamiento de sanciones económicas, que incluyen un embargo al petróleo venezolano, que le ha cerrado vías de financiamiento en medio de una dura crisis económica.
Guaidó también ha dicho estar preparado para sentarse con el gobierno. Exige un cronograma de elecciones que incluya comicios presidenciales, a cambio de un “levantamiento progresivo” de sanciones.
Estados Unidos y la Unión Europea ya han expresado su disposición a revisar las medidas coercitivas si avanzan las discusiones en pro de elecciones “creíbles”.
Venezuela se prepara para celebrar comicios de alcaldes y gobernadores el 21 de noviembre, que Maduro se ha comprometido a respetar, buscando recuperar reconocimiento internacional.
La última vez que gobierno y oposición se sentaron en una mesa de negociaciones fue en Barbados en 2019, auspiciados también por Noruega. Esas conversaciones se agotaron sin acuerdos.