La premisa fundamental para analizar esta “revolución” es que todo lo que ha sucedido en estos 22 años en Venezuela, obedece a una rigurosa planificación. Nada es casual. Ni la destrucción de Pdvsa: Ni la destrucción del país, reflejada en el 20% de empresas activas, la reducción varias veces del PIB, el consumo de carne disminuido en veinte años desde más de 20 kilos por persona, hasta cuatro kilos. Y claro, en la primera hambruna petrolera de la historia.
RL / Idaed / Informe21
Nada es casual, todo está fríamente calculado, como diría el chapulín. En línea con el desiderátum de destrucción estratégica para implantar el comunismo en Venezuela. Destruye primero y gobierna después: El modelo cubano.
LEY INCOSNTITUCIONAL
La implantación de las Ciudades Comunales es la etapa planificada por la “revolución” para este momento. Abogados de prestigio alertan que la Ley Orgánica de las Ciudades Comunales contradice la Carta Magna. Esta reza en su artículo 16: “El territorio nacional se divide en el de los Estados, Distrito Capital, las dependencias federales y los territorios federales. El territorio se organiza en Municipios”. En ninguna parte dice Ciudades Comunales.
Para incorporarlas deberían cambiar la Constitución mediante un referéndum. No lo van a hacer porque se saben de derrotados de antemano.
Pero eso no será obstáculo para que impongan la Ley en nuestras narices, llueva, truene, o relampaguee.
DESIDERATUM
Ya lo dijo aquel argentino asesor de Chávez en los albores de este desastre, cuando habló acerca de la relación directa Líder – Pueblo, haciendo innecesarias las alcaldías y las gobernaciones.
Así mismo hay que recordar al prócer de la “revolución” que dijo que lo que tenía que hacer cada alcalde y cada gobernador era desmontar las alcaldías y las gobernaciones, porque “con ellas no se va a hacer la revolución”. Algo como Pueblo y Dios sin fastidiosos intermediarios. O sea, mesianismo y dictadura.
Y claro, todo en el nombre del pueblo, el mismo pueblo que cuando reclame, le dirán como al Cristo en los Hermanos Karamazov cuando protestaba por las injusticias: Mire Cristo, es mejor que se quede tranquilo porque de lo contrario, vamos a tener que crucificar a Jesucristo en el nombre de Cristo.
COMUNAS: HISTORIAS DE FRACASO Y HAMBRE
Las comunas fracasaron en China. Las implantó el comunista Mao en el campo, con el cuento del Gran Salto Adelante, que resultó un salto en el vacío, y con aquello de “dejad que florezcan cien flores”, que devinieron en una poda de ideas y de cabezas cuando la gente se creyó el cuento de que podía expresarse libremente. Las comunas de Mao produjeron la mayor hambruna de que se tenga memoria. 15 millones de muertos.
En el comunismo soviético, los resultados de las comunas fueron tan desastrosos que el mismísimo Stalin ordenó que suspenderlas en 1930. Stalin, el mismo Padrecito de la colectivización forzada y de las purgas de Siberia. Sin embargo, continuaron, a tal punto que quien realmente las eliminó fue el hasta ahora no dimensionado líder Gorbachov.
Todas las comunas comunistas atentan contra la individualidad, la privacidad, la propiedad y sobre toda contra las dinámicas de productividad, que son las que realmente generan calidad de vida, dentro de esquemas de libertades de expresión y económicas.
Para lo único que sirven es para implantar la dictadura del proletariado, vehículo de la “democracia popular” de los comunistas.
TIPS DE LA LEY DE CIUDADES COMUNALES
– Va contra el sentir popular
Imponen el socialismo, en un país que en más del 80% no quiere al socialismo y detesta al gobierno. Vean las encuestas
– Vacía las atribuciones de los municipios y estados
La ley permite a las Ciudades Comunales, atribuciones y competencias de las gobernaciones y alcaldías.
La relación directa comunidad – gobierno central para solicitar recursos, pasa por encima de lo local y regional. ¿Dónde queda la planificación operacional de los estados y los municipios?
Retroceso respecto al logro de la democracia en 1945. Según la Ley, escogen voceros en comunidades organizadas, que luego se reúnen en Comunas, y después en Ciudades Comunales, así hasta la representación nacional. Como cuarto grado para la elección de los representantes. En el mejor de los casos el primer vocero es electo mediante un Centro Electoral, diseñado por ellos mismos, cuyo objetivo es el socialismo (lo dice la ley).
– Genera burocracia:
Se multiplican los funcionarios del Estado. Cada ente tiene parlamento, contraloría, justicia y paz, comisión electoral (socialista por objetivos de las comunas), educación, infraestructura, etc. Miles de mini gobiernos. ¿Cuántos cargos? Por cierto, ¿cuánto cuesta?
Si en realidad la Asamblea le preguntara al “pueblo” su opinión sobre esa Ley, el rechazo sería gigantesco. Ellos lo saben. Pero la “revolución” se caracteriza cada vez más en construir mayorías desde la minoría, y encima se jactan de ser democráticos. Por eso es que nadie les cree, ni en Venezuela, ni en el mundo libre.
¿Será que piensan eliminar la hiperinflación con el trueque de las comunas? ¿O van a revertir los dramáticos cuadros de desnutrición, o la desarticulación económica del país? Claro que no. Ese modelo comunal no ha generado prosperidad en ninguna parte.
Pero, ¿Es que realmente al gobierno le interesa que las Ciudades Comunales generen prosperidad? ¿O será que lo que realmente buscan es el poder forever? Proyecto Lobo Feroz, para comerte mejor.
Ya lo dijeron los chinos en su proyecto comunal de 1958: Comunas – Socialismo- Comunismo. Estaban claritos. ¿Y usted?
Por: Rafael Gallegos