El excandidato presidencial Henrique Capriles llamó a participar en las elecciones regionales y locales convocadas para el 21 de noviembre próximo.
RL / Idaed / TalCual
En rueda de prensa en Caracas, su primera en casi cuatro años, afirmó que “creo que tenemos que hacer uso de un derecho que está en la constitución (el voto), a pesar de las marramuncias”. Dijo que no basta con la queja sino activarse a través del sufragio “que es el arma de la democracia que queremos recuperar. Yo voy a votar el 21 de noviembre”.
Su partido Primero Justicia no ha confirmado que llamará a votar, y no tiene tarjeta para postular. Pero Capriles dijo que no se puede satanizar a quien quiera ser alcalde, concejal o gobernador. “Y si no hay anuncio formal, la gente sabrá quiénes son esos candidatos”.
El también exgobernador de Miranda señaló que “nosotros tenemos que hacer las postulaciones y presentar líderes regionales y locales para que podamos ver el 21N como la oportunidad de organizarnos, movilizarnos”. Afirmó que es urgente definir candidaturas unitarias: “lo que no puede haber son 18 candidatos, tiene que haber madurez”.
Esos nombres deben ser, a su juicio, los que compitan a través de la tarjeta MUD. “Creo que debemos ir con una tarjeta única, porque hay partidos que les arrebataron las suyas. Ese tema habrá que resolverlo pero para el 21N debemos buscar la solución llamando a la gente a votar por la tarjeta de la Unidad y no usando La Fuerza del Cambio u otras que haya por ahí. Pero eso está en discusión”.
Capriles agregó que “lo que sufre la gente en los lugares más lejanos de Caracas es muy fuerte. Nosotros necesitamos que ese pueblo tenga voz y que esa voz esté legitimada por el propio pueblo. Tenemos a la vuelta de la esquina un proceso que debemos asumir sin complejos”.
El exgobernador afirmó que “siempre que vamos a los sectores más necesitados, luego de las denuncias y las peticiones que recibimos, surge la pregunta de qué vamos a hacer”. Ante ello llamó a “hablarle a la gente con la verdad porque el cambio político y el rescate de la democracia no se va a dar de un día para otro”.
Dijo que el año pasado no pudo concretar la participación electoral, pero que ahora hay un mejor CNE que entonces, y hay que aprovecharlo. “Dijimos que participaríamos si había observación internacional y no la hubo”, detalló.
También recordó que el nombramiento de un nuevo CNE en 2021 “movió el tablero”. Dijo conocer a dos rectores que sí los defiende “porque son dos personas comprometidas con la democracia, y que Enrique Márquez y Roberto Picón estén ahí adentro para mí sí es una garantía que no teníamos el año pasado”.
Capriles sostuvo que firmar unas garantías electorales no son garantías porque esas se pelean “hasta el mismo día de la elección”. En años anteriores, recordó, “no inscribimos para el proceso, yo no voté. ¿Fue mejor o peor? Bueno, yo creo que ahora hay que hacerlo”. Por eso reiteró su confianza en que “allí habrá dos rectores pendientes, y hay que resolver los temas pendientes como las inhabilitaciones. Pero debemos salir de esta inercia”.
Hizo público su respaldo a Carlos Ocariz para la gobernación de Miranda y dijo querer viajar a distintas entidades para apoyar liderazgos regionales y locales. “Creo que es él quien puede ganar allí, y yo conozco el estado y conozco a todos los que aspiran”.
Negociación sí, falsa oposición no
Sobre los encuentros entre opositores y el chavismo en México, Capriles señaló estar de acuerdo con “cualquier proceso” que conduzca a acuerdos que permitan encontrar soluciones para Venezuela. “Esto se lo llevan a México porque se quiere que las partes estén en igualdad de condiciones, y eso es más probable que ocurra en un país que no es el nuestro”.
Capriles llamó a discutir en México no sólo temas políticos y de mecánica electoral sino asuntos sociales, como lograr la vacunación masiva anti covid-19 incluso con donaciones de Estados Unidos, la escasez de gasolina o el fortalecimiento del Programa Mundial de Alimentos a escala nacional. “Cada partido político tendrá cosas que decir allí. El mío (Primero Justicia) tendrá como delegado a Tomas Guanipa. Stalin González se va a incorporar por petición de la delegación que va a México”.
Capriles calificó como “normales” los desencuentros entre opositores. “Los demócratas tenemos que aglutinar a todos los que estamos descontentos frente a quienes son los responsables de que cómo está viviendo el país”.
Por eso dijo que no se busca que el proceso de negociación sea excluyente sino eficiente. “Esto no debe ser un show de televisión sino algo muy serio. Creo que tener discusiones serias y francas sin cámaras puede tener mejores resultados”, agregó.
Fue enfático al decir que “hay una falsa oposición, que declara, bien trajeados. Aquí nos conocemos todos y sabemos lo que está detrás. Pero yo no presto atención a esa falsa oposición. Es distinto a quienes expresan diferencias, qué hay que escuchar porque esto no es un cogollo”. No obstante, dijo que “tomarse una foto” unitaria opositora “no resuelve el problema”.
Sobre opiniones políticas de algunos actores, dijo que “es lógico que haya factores que no se sientan representados (con la delegación opositora que irá a México) porque vivimos una crisis política. Creo que sobre la marcha eso va a ir cambiando. Por ahora no es viable tener 500 enviados de muchos sectores”.
A su juicio, el “proceso de México” no es excluyente de la opción electoral. “Fuimos una opción de poder fuerte y robusta pero eso ya no es así. Debemos volver a serlo. Hay que asumir la realidad y no dar más vueltas sobre algo que todos sabemos qué hay que cambiar”. Llamó a la oposición a alinearse y organizarse de nuevo. “Nuestro objetivo no son unas elecciones locales, pero ese es un paso que está en la constitución y debemos asumir”.
Explicó que para quienes sienten miedo, quienes están sometidos por el hambre al CLAP o tiene otras características de necesidad, votar es la única manera de expresarse. “Eso no hay que condenarlo sino canalizarlo”, señaló. “Los más pobres son los más afectados y es allí donde más se necesita la buena política para atender esa brecha social, la más grande en la historia. Aquí no hay una recuperación económica porque hasta que no haya un acuerdo real y una visión a largo plazo, no tendremos el país que queremos”.