La historia del Dr. José Gregorio Hernández es sencillamente maravillosa, su amplio conocimiento de la medicina le hicieron acreedor de enormes títulos en las ciencias por su capacidad de aportar nuevos conocimientos e investigaciones que posteriormente convertirían al país en vanguardia en el tema de la salud.
RL / Idaed / LaPatilla
Nacido en Isnotú, Distrito Betijoque del Estado Trujillo, el 26 de octubre de 1864, hijo de Benigno Hernández Manzaneda y de Josefa Antonia Cisneros Mansilla, una familia muy humilde, cuyo seno constituyó su primera escuela de formación, ha servido de inspiración hasta convertirle en un icono de la cultura postmoderna.
Es conocido como el fundador del primer laboratorio del país, que revelaba su aprendizaje en sus grandes estudios en París, Francia, y le convertirían en un experto de los pocos vistos en Sudamérica.
Se le otorga el título del padre de la medicina experimental del país.
Además, el Dr. José Gregorio Hernández, fue un hombre de vocación cristiana, quien dedicó también su vida a servir a los más desfavorecidos sin importar nada a cambio.
Desde 1949 comenzó el proceso de canonización para convertirlo en Santo, hasta que en 1986 el papa Juan Pablo II le declaró el título de venerable.
Ahora este viernes 30 de abril la Iglesia Católica concederá su beatificación, resultado del milagro concedido a la niña Yaxury Solorzano, herida de bala en la cabeza.
Aquí el reportaje: