Un hombre entra a una carnicería y dispara indiscriminadamente, sin mediar palabra, contra empleados y clientes. El suceso, que dejó un muerto y tres heridos, es uno de los ataques de bandas de extorsión que tienen en vilo a comerciantes en la ciudad venezolana de Maracaibo.
Idaed / France24
Las autoridades califican estos hechos como “actos de terrorismo” y el fiscal general, Tarek William Saab, informó de tres detenciones por este caso.
“Hay miedo, pánico, incertidumbre”, dijo a la AFP la dueña de un comercio en el centro de esta ciudad petrolera del estado Zulia, fronterizo con Colombia, muy castigada por la crisis.
“¿Qué les pedimos a las autoridades? Que cese la impunidad, que caiga quien caiga”, agrega esta mujer, quien pide reservar su identidad por seguridad, aunque llama a sus “amigos comerciantes” a no dejarse paralizar por el temor. “Hay que denunciar porque son muchos (los comercios bajo amenaza de extorsionadores), esto es apenas la punta del iceberg (…). Hay que acabar con el terror trabajando”.
El ataque en la carnicería ocurrió a media mañana del sábado previo a Carnaval, el 18 de febrero. El sujeto llegó en moto junto a otro individuo, ingresó al local e hizo múltiples disparos. Uno de los trabajadores del comercio falleció al día siguiente en un hospital por una herida de bala en el abdomen.
“Yo lo que necesito es que se haga justicia (…). Él estaba en el mostrador y fue el primero en recibir los disparos”, declaró el hermano de la víctima al diario local Versión Final.
Ese mismo día, casi de manera simultánea y con parecido “modus operandi”, otro hombre hizo varios disparos en un supermercado con saldo de cinco heridos.
En estos dos incidentes se dejaron panfletos en los que jefes de grupos criminales se atribuyeron los ataques, indicó Saab.
El viernes pasado, en otro hecho presuntamente vinculado con redes de extorsión, se lanzó una granada -que no detonó- contra una tapicería, informaron cuerpos policiales.
“Vacunas” de 20.000 a 30.000 dólares
Son bandas que “buscan extorsionar” a grandes comercios en Maracaibo, exigiendo “vacunas” (tributos) que llegan a oscilar entre 20.000 y 30.000 dólares mensuales, explicó Saab.
El Ministerio Público pide para los involucrados la pena máxima que establece la ley en Venezuela: 30 años de prisión. Imputó a los tres arrestados, entre otros delitos, por terrorismo y extorsión.
El funcionario dijo que uno de los autores intelectuales de los ataques del 18 de febrero, a quien identificó como Guillermo Rafael Boscán, alias “El Yiyi”, vive en Estados Unidos con una identidad falsa. Su despacho emitió una alerta roja de Interpol.
Se solicitaron también órdenes de captura internacionales contra otros de los acusados radicados en la vecina Colombia, de acuerdo con Saab.
A manera de balance, sin precisar período, el fiscal informó que en todo el país se han detenido a 188 integrantes de 13 “grupos de delincuencia organizada” por delitos relacionados con extorsión, incluidos miembros del temido “Tren de Aragua”, megabanda que ha extendido sus operaciones a varias naciones de América Latina como Colombia, Ecuador, Chile, Perú y Bolivia. Un total de 79 han sido condenados.