El secretario general de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Jorge Arreaza, expresó su firme rechazo a los genocidios derivados de las ambiciones capitalistas a través de su canal de Telegram y enfatizó que los verdaderos cristianos no pueden apoyar ningún tipo de violencia, especialmente contra la población civil inocente, sin importar su origen étnico, cultural o geográfico.
“Los verdaderamente cristianos en Cristo, no pueden apoyar ningún tipo de violencia entre los seres humanos; mucho menos de guerras, genocidios y actos contra la población civil inocente, independientemente de su origen étnico, cultural o geográfico. Son nuestros prójimos, en dificultades, sin duda”, detalló Arreaza en la mencionada red.
En su mensaje, el funcionario reflexionó sobre cómo las agresiones hacia el prójimo, impulsadas por los poderes dominantes de la época, en este caso el capitalismo, son inaceptables. Comparó estas acciones con las que Cristo habría enfrentado, y sugirió que Jesús expulsaría a los mercaderes que manchan a la humanidad con sus actos. “En este caso del capitalismo y sus ambiciones de poder mundano. Cristo saldría con su látigo a encargarse de los mercaderes que manchan a la humanidad”, acotó.
Arreaza ha reiterado en varias ocasiones la necesidad de que los pueblos del Sur global avancen en un plan común para alcanzar la verdadera liberación, igualdad, independencia y descolonización. A su juicio, la esperanza del mundo reside en América Latina y el Caribe, regiones que, por su naturaleza antiimperialista y libertaria, pueden romper con la hegemonía del capital.
El líder del ALBA-TCP también destacó la importancia de la insurgencia como una característica inherente de los pueblos latinoamericanos y caribeños. Subrayó que esta región debe ser el pilar de un proceso histórico de descolonización y la construcción de un nuevo modelo que promueva la vida y la sostenibilidad.
Finalmente, Arreaza hizo un llamado a establecer metas claras en los ámbitos político, económico, cultural y estratégico, para reproducir la vida y asegurar la existencia de la humanidad. Finalmente, insistió en la urgencia de redefinir la relación con la madre tierra y adoptar nuevos valores para lograr una verdadera transformación, reseñó VTV.
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