América Latina sufrió un retroceso en las libertades básicas y el respeto a la institucionalidad democrática, asegura el más reciente informe de Human Rights Watch sobre la situación de los derechos humanos en el mundo correspondiente al 2021.
RL/ Idaed / Yahoo
“El alarmante retroceso de las libertades fundamentales en América Latina nos obliga hoy a defender espacios democráticos que solíamos dar por sentados”, expresó Tamara Taraciuk Broner, directora interina para las Américas de Human Rights Watch. “Incluso líderes que llegaron al poder mediante elecciones democráticas han atacado a la sociedad civil independiente, la libertad de prensa y la independencia judicial.
Millones de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y países, y la pandemia ha tenido un impacto económico y social devastador”. El informe, publicado el miércoles, destaca los procesos judiciales “abusivos” a los manifestantes del 11 de julio en Cuba; la realización de comicios en Nicaragua sin las “mínimas garantías democráticas”, precedidos por una ola de arrestos a opositores, así como la investigación de la Corte Penal Internacional sobre posibles crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela bajo el gobierno de Nicolás Maduro.
En relación a Cuba, el documento detalla la represión del gobierno a las protestas multitudinarias de julio. Unas 1,355 personas fueron detenidas, según el más reciente conteo de la organización de ayuda legal Cubalex. Los juicios a 57 manifestantes comenzaron esta semana en Santa Clara, Holguín y La Habana, bajo fuerte presencia policial y sin garantías procesales, según declararon a el Nuevo Herald familiares de los detenidos.
“Fue toda una payasada,” comentó Roxana García Lorenzo sobre el juicio a su hermano, Andy García Lorenzo, y a otros 15 manifestantes en la ciudad de Santa Clara. “Los testigos que tiene la fiscalía son 29, todos son oficiales de la policía, oficiales de la seguridad del estado diciendo mil mentiras. Ellos ni conocían a los presos. La declaración que hicieron hoy no coincidía con la que habían hecho anteriormente”.
El informe de Human Rights Watch llama la atención sobre el enjuiciamiento a menores de edad por participar en las protestas, el arresto de disidentes y artistas como José Daniel Ferrer, Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Castillo, conocido como “Osogbo”, y en general el aumento del acoso a artistas, activistas y periodistas independientes en la isla.
También menciona distintas regulaciones para coartar la libertad de expresión y de prensa. “Los cubanos están viviendo posiblemente una de las peores situaciones de derechos humanos en lo que va del siglo,” comentó Juan Pappier, investigador senior de la división para las Américas de Human Rights Watch. “A la brutal estrategia de represión y censura del régimen se agrega una crisis económica grave que ha tenido un impacto desolador sobre los derechos económicos y sociales de la población”
Pero la organización también ha señalado el creciente autoritarismo en países como Brasil, México y El Salvador, con gobernantes que fueron elegidos democráticamente. Los tres líderes han intentado amenazar o cooptar el sistema judicial de sus países.
En Brasil, Jair Bolsonaro hizo alegaciones infundadas de fraude electoral, menciona el documento, mientras que el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador ha atacado a periodistas y defensores de derechos humanos, e intentado eliminar organismos públicos independientes que limitan su poder.
En El Salvador, el presidente Nayib Bukele y aliados en el congreso reemplazaron a magistrados de la Corte Suprema con el objetivo de asegurar la reelección consecutiva, que está prohibida por la constitución de ese país.
Human Rights Watch destaca además cómo la inestabilidad en la región, así como el impacto económico y social de la pandemia, han generado millones de desplazados y migrantes. Entre los pocos acontecimientos “alentadores” mencionados por el reporte se citan la aprobación del matrimonio igualitario en Chile y la despenalización del aborto en Argentina y México.